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Volkswagen reduce gastos tras escándalo

Volkswagen reducirá sus gastos en 1.000 millones de euros (1.070 millones de dólares) el año próximo y dará “estricta prioridad” a sus inversiones para afrontar los gastos derivados del escándalo por manipulación de pruebas de emisiones contaminantes, dijo el viernes el director general Matthias Mueller luego de una reunión del directorio.

La automotriz, que en las próximas horas debe presentar a las autoridades estadounidenses su plan para reparar los autos diésel afectados por el escándalo, ha resuelto cancelar o aplazar las inversiones que no sean “absolutamente necesarias”, dijo Mueller. Con ello reducirá sus gastos de capital a 12.000 millones de euros en 2016.

“Lo que decididamente no haremos es efectuar recortes a costa de nuestro futuro”, dijo Mueller.

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Entre otras medidas, dijo, Volkswagen aplazará la construcción de un nuevo centro de diseño en Wolfsburg y la presentación de un sedán Phaeton eléctrico, además de revisar diversos proyectos.

“Nos moveremos con cautela en los próximos meses, pero sabemos a dónde queremos ir y queremos garantizar que la compañía Volkswagen salga fortalecida de la situación actual”, dijo en una breve declaración a la prensa, sin admitir preguntas, después que el directorio de 20 miembros se reunió en la sede empresarial.

Volkswagen reconoció en septiembre que casi medio millón de sus autos diésel de cuatro cilindros en Estados Unidos habían hecho trampas en las pruebas de emisiones mediante un programa informático. Unos 11 millones de autos en el mundo tienen el programa, pero no se ha confirmado que hayan hecho trampas fuera de Estados Unidos.

La automotriz ha asignado 6.700 millones de euros (7.400 millones de dólares) para cubrir los gastos de retirar los autos equipados con el programa, pero los expertos dicen que el costo total, que incluye multas y lucro cesante, podría ser varias veces mayor.

Volkswagen tiene plazo hasta las próximas horas para presentar un proyecto de reparación de los autos afectados a la Agencia de Protección Ambiental estadounidense y la Junta de Recursos de Aire de California, los dos organismos que le obligaron a reconocer las trampas. La empresa se reunió con las agencias el jueves y debe hacer la presentación final el viernes.

Tendrá dos opciones para reparar los autos. Puede instalar un sistema de escape más grande para atrapar el óxido de nitrógeno o bien instalar un proceso de tratamiento químico que reduce la contaminación.

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